miércoles, 22 de octubre de 2008

Homenaje a un Círculo de Estudios

Al Círculo de Estudios Lingüísticos y Literarios “Luis Hernán Ramírez”
de Lambayeque en su XI Aniversario

Ex - timados niños:

No, no me he equivocado. Ortega y Gasset decía que el niño es el padre de hombre, enfatizando el papel que les compete a los jóvenes de regenerar la vida. Ustedes, los actuales integrantes de este ejemplar grupo de trabajo, han optado por un camino contrario al común: la inconformidad frente a la mediocridad, el oportunismo y la ignorancia. Al rechazar las múltiples ocasiones que el actual modo de vida dominante ofrece para la enajenación, el abuso y la indolencia son vistos por muchos probablemente como niños porque todavía creen que las cosas pueden cambiar. ¡Cómo me gustaría tener dieciocho años, vivir en esa hermosa tierra de la amistad y estudiar de nuevo en la universidad! Estaría junto a ustedes trabajando, convencido de que se puede ser un maestro que no solo posea conocimientos, tenga vocación de diálogo y respete profundamente a los semejantes sino, y sobre todo, que predique con el ejemplo.

Me alegra sobre manera que, once años después de su creación, existan otros estudiantes que miren el mundo con ojos de infantes. Estoy convencido de que esa voluntad de ver al mundo como si fuera la primera vez, unida al esfuerzo colectivo y solidario, es la única esperanza que tiene la humanidad para intentar otra vez construir una existencia humana plena para todos, sin las miserias, las atrocidades y las injusticias de hoy. Ustedes serán los padres de hombres que al reintentar un nuevo compromiso en el tiempo tal vez no cometan tantos errores, sean más tolerantes y conviertan esta crónica policial o película de monstruos que es el mundo actual en una historia de amor, sencilla y plena.

A la distancia me identifico con cada uno de ustedes. Espero tener la ocasión más adelante de estar otra vez participando de alguna actividad de formación y análisis. Sólo les dejo una breve reflexión para seguir conversando. La fundamentación última de vuestra conducta disidente no la encontrarán en la razón o en la verdad. Esta época, donde campea la ética del canalla, nos arrostra a la cara la impunidad, cuyo cinismo argumenta –como Trasímaco en la República de Platón- que es altamente rentable elevarse hasta la suprema injusticia pues se gozará de grandes beneficios, mientras que el altruismo, la honestidad y el respeto no recompensa en este ni en ningún lugar.

Jóvenes, la fundamentación a vuestro compromiso humanista, no la encontrarán en la razón de la ciencia ni en la verdad de la experiencia, solo en la palabra poética que nos imagina diferentes. Gracias a la literatura uno trata al prójimo como nos gustaría que nos trate. Todo ello por una razón estética que se convierte en ética: porque soy libre de elegir aquello que me hace sentir más plenamente humano.

Me despido con un fuerte abrazo.

Miguel Ángel Huamán

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un circulo que dura 11 años. Como lo lograron? Donde puedo averiguar mas sobre ellos?